3 de julio de 2008

Ya no se qué pensar. Qué hacer. En qué creer. Porque todo eso en lo creía un día se disolvió, y me di cuenta que hasta la fortaleza más perfecta puede destruirse, que el palacio más lujoso puede perder su brillo y el rey más poderoso su prestigio. Todo eso tan lindo que sentía se derrumbó en mí. Perdí la confianza y perdí a esas personas tan importantes también, porque de ellas solo obtenía lo mejor. Sus falsas sonrisas y dulces miradas solo ocultaban la avaricia que ellas dentro llevaban. Pero las mentiras tienen un corto tiempo de expiración y se vencen sin compasión. Cuando salen a la luz rompen el hielo y generan discordia, pero sobretodo estas mentiras traen dolor y decepción. Cambian la imagen de esa persona y lastiman el amor que les tenías. Te das cuenta que ellas debajo de una careta se escondían, que mentían con cada 'te amo' que decían y cada vez que contigo reían. Ahora solo quisiera poder borrar de mi todo eso que alguna vez por ellas dejé, por ellas era capaz de darlo todo, ¿pero para qué seguir gastando palabras en algo que ya ni siquiera merece mi atención?